“Existen muchas medidas en todo el mundo que se están tomando para
retomar el control sobre las mujeres. El sistema lo que busca es controlar y
decidir dónde, cuándo y con qué perfil nacerá su nueva mano de obra”
Silvia Federici, historiadora, activista, escritora.
Según Silvia Federici, "la caza de brujas sirvió para perseguir a una serie de creencias y prácticas populares. Fue un arma para derrotar la resistencia a la reestructuración social y económica".
Para razonarlo, analiza el contexto histórico que hizo posible la cacería: la peste negra, que eliminó a un tercio de la población europea en 1348. Los que sobrevivieron a la plaga, enfrentados a la posibilidad de una muerte súbita, se quedaron sin ganas de trabajar.
"Trataban de pasarlo lo mejor posible, regalándose una fiesta tras otra sin pensar en el futuro", escribe Federici.
Al descender bruscamente el número de trabajadores, la gente empezó a desafiar el poder de los señores feudales. "La mezcla de población diezmada y abundancia de tierras hizo que las amenazas de los señores dejaran de ser efectivas. Los campesinos podían moverse libremente y hallar nuevas tierras para cultivar".
"Trataban de pasarlo lo mejor posible, regalándose una fiesta tras otra sin pensar en el futuro", escribe Federici.
Al descender bruscamente el número de trabajadores, la gente empezó a desafiar el poder de los señores feudales. "La mezcla de población diezmada y abundancia de tierras hizo que las amenazas de los señores dejaran de ser efectivas. Los campesinos podían moverse libremente y hallar nuevas tierras para cultivar".
Durante el siglo XIV, se multiplicaron las huelgas en Europa. En la Baja Edad Media, el salario real creció en Europa un 100%, los precios cayeron un 33% y disminuyó la jornada laboral.
La aristocracia terrateniente y los nuevos Estados contraatacaron con una serie de medidas que sentaron las bases del capitalismo en los siguientes tres siglos.
Un ejemplo de las novedosas políticas capitalistas fueron los
cercamientos de tierras: la eliminación del sistema de campo abierto. "Tan pronto se
privatizó la tierra y se expandieron sus propiedades, las relaciones monetarias comenzaron a dominar la
vida económica, las mujeres encontraron mayores dificultades que los hombres para
mantenerse. Se las confinó al trabajo reproductivo en el preciso momento
en que este trabajo se estaba viendo absolutamente devaluado".
Las mujeres, que hasta entonces
habían podido dedicarse a recolectar la huerta (la agricultura de
subsistencia comenzó a estar mal vista porque no aportaba beneficios a
ningún empresario) o incluso a
trabajar en las ciudades (72 de los 80 gremios ingleses incluían
mujeres), quedaron confinadas a los muros del hogar. Dedicadas al
trabajo doméstico no remunerado (que profundizó en su dependencia de los hombres). Eso sí, una siempre
podía elegir entre eso, morir pobre o acabar en la hoguera. "Las acusadas eran granjeras pobres,
que aún poseían un pedazo de tierra propio, pero que apenas sobrevivían
y, con frecuencia, despertaban la hostilidad de sus vecinos por haber
empujado a su ganado para que pastara en su tierra o por no haber pagado
la renta".
Sostiene Federici que la irrupción del capitalismo fue "uno de los periodos más sangrientos de la historia de Europa", al coincidir la caza de brujas, el inicio del comercio de esclavos y la colonización del Nuevo Mundo. Los tres procesos estaban relacionados: se trataba de aumentar a cualquier coste el mercado de trabajo.
“Realmente
no sabemos lo que hicieron estas mujeres porque las confesiones eran
realizadas bajo tortura. Así que esta interpretación no se basa en
ninguna evidencia firme, es puramente especulativa.”
Así, Federici analiza el caso de la brujería, y:
Así, Federici analiza el caso de la brujería, y:
La escoba que vuela:
“La acusación de que estas
mujeres volaban a encuentros secretos tiene mucho que ver con, para
empezar, el miedo a estas reuniones, el miedo a las asambleas
campesinas, de gente reunida, conspirando, que tenían lugar de noche
porque cualquier cosa no legal tenía lugar bajo el manto de la
oscuridad. La cuestión de volar también se relaciona con el fuerte
ataque que tiene lugar en estos momentos contra la movilidad de las
personas.” “Estoy muy
inclinada a ver el horror que provocaba la idea de las mujeres volando
por los aires, moviéndose a grandes distancias, como un ejemplo, un
continuo de estos ataques sobre la movilidad.”
Los ungüentos:
“Alguien ha
señalado también -y resulta un detalle interesante a tener en cuenta-
que las imágenes de las mujeres cubriéndose de ungüentos que nos ha
llegado del siglo XVI podrían estar inspiradas en imágenes similares que
se estaban representando de gente de las colonias americanas (“brujas”,
médicos y chamanes de México y la región andina). Hacia mediados y
finales del siglo XVI hay un cierto intercambio de imágenes y conceptos
entre el proceso de colonización y la caza de brujas en Europa.”
Los aquelarres:
"Los bienes
comunes no significaban únicamente un medio de subsistencia, de paliar
la desigualdad, sino también todo un sistema de organizar las relaciones
sociales; eran las bases para un tipo de vida democrática en el que la
gente tomaba decisiones conjuntamente, mediante asambleas campesinas en
donde la circulación de conocimiento se producía de forma colectiva. A
su manera, los comunes son un cierto tipo de poder y es ahí cuando me di
cuenta de que el capitalismo necesitaba acabar con ellos; no sólo
apartar a la gente de la tierra sino destruir este tipo de relación
comunal que implica que muchas formas de trabajo se realizaban
colectivamente, incluyendo a las mujeres. La gente decidía conjuntamente
cuándo sembrar, cuándo cosechar de forma colectiva. Y esto generaba
unos lazos muy profundos lo que explica también que las luchas fuesen
tan intensas y prolongadas.”
Control de natalidad:
"La obsesión por incrementar la población (léase la fuerza de trabajo)
fue otro de los motivos que impulsaron la persecución, que demonizó
cualquier forma de control de la natalidad y de sexualidad
no-procreativa, al mismo tiempo que acusaba a las mujeres de sacrificar
niños al demonio". "La histeria contra las mujeres se alimentó en base a todo tipo de
leyendas urbanas y rurales. Se decía que una bruja podía castrar a los
hombres o dejarlos impotentes. Algunas incluso tenían la capacidad de
robar sus penes a los varones y esconderlos en nidos. Otra acusación
que se repetía en los tribunales es que las brujas llevaban a cabo
prácticas sexuales degeneradas; por ejemplo, copular con el Diablo."
"Si en la Edad Media las mujeres habían podido usar métodos
anticonceptivos y abortivos y ejercer un control indiscutible sobre el proceso del
parto, a partir de entonces sus úteros se transformaron en territorio
político".
"Sí, creo que sigue
teniendo lugar una caza de brujas. Ha crecido toda una campaña
ideológica que pretende controlar
la vida de las mujeres, su sexualidad,
su cuerpo, un esfuerzo mayor por
controlar la capacidad reproductiva
de las mujeres. En varios Estados se
criminaliza a las mujeres si pueden
“probar” que estando embarazadas
han puesto en riesgo la vida del feto
que están gestando. Y desde luego la
cuestión del aborto es muy importante."
“Existen muchas medidas en todo el mundo que se están tomando para retomar el control sobre las mujeres, perdido tras unas décadas de aparente libertad (en algunos países). No es un problema de número, de cuánta gente nace, pues mientras en unos países se acota la natalidad, a la vez, en otros se fomenta. El sistema lo que busca es controlar y decidir dónde, cuándo y con qué perfil nacerá su nueva mano de obra”
La caza de brujas del Siglo XX:
La acusación de brujería reaparece “a finales de los 80,
durante los 90 y hasta la actualidad en varios países de África, en
India, Nepal; ha habido casos de brujas quemadas en Papúa Nueva Guinea,
incluso en Timor Oriental recientemente. Y estamos hablando de miles de
mujeres en África, al menos veinte mil se han calculado, y también
algunos varones, principalmente hombres mayores y niños.”
"Tengo una amiga que volvió de Ghana hace poco y me explicó que, por la noche, en la televisión, hacen unos programas donde te enseñan cómo reconocer a una bruja. Hay un documental muy interesante que salió el año pasado, llamado The Witches of Gambaga, que habla sobre los campos de brujas que hay al norte de Ghana, donde viven mujeres que han tenido que dejar sus pueblos e ir a vivir allí, acusadas de ser brujas, porque sino las hubieran matado. Estos campos están financiados por el gobierno, y cuando han pasado unos años, en algunos casos, las dejan volver a sus pueblos, pero a otras muchas las matan. Pero no sólo es Ghana, es también Tanzania, Kenya..."
"Tengo una amiga que volvió de Ghana hace poco y me explicó que, por la noche, en la televisión, hacen unos programas donde te enseñan cómo reconocer a una bruja. Hay un documental muy interesante que salió el año pasado, llamado The Witches of Gambaga, que habla sobre los campos de brujas que hay al norte de Ghana, donde viven mujeres que han tenido que dejar sus pueblos e ir a vivir allí, acusadas de ser brujas, porque sino las hubieran matado. Estos campos están financiados por el gobierno, y cuando han pasado unos años, en algunos casos, las dejan volver a sus pueblos, pero a otras muchas las matan. Pero no sólo es Ghana, es también Tanzania, Kenya..."
“Las mujeres han
sido expulsadas de las tierras comunales para las compañías mineras, de agrocombustible, de negocios agrícolas que
llegan a acuerdos con los jefes locales y los gobiernos. Así que el
sistema de tierras comunes, que prevalecía todavía en África, se está
destruyendo. Este es el
contexto, que es un contexto muy
similar al del siglo XVI y XVII.”
"Claramente, cualquier poder que podamos tener va a ser el que construyamos, no el que nos otorgue el Estado.” "La cuestión es cómo reclamar esa riqueza sin darle al Estado el poder de organizar nuestra vida o validar su figura como protector y fuente de cohesión y bienestar social.”
Fuente y extractos del libro:
Calibán y la bruja. Mujeres, cuerpo y acumulación originaria. Silvia Federici.
Para leerlo, aquí: http://www.lahaine.org/index.php?p=30300
http://depoliticaehistoria. blogspot.com.es/2012/12/ silvia-federici-la-caza-de- brujas.html
http://www.publico.es/ culturas/341987/capitalistas- contra-brujas
http://info.nodo50.org/La- caza-de-brujas-revela- aspectos.html
"Y
voy a poner un ejemplo: el Banco Mundial ha llevado a cabo una campaña
para mostrar que la agricultura de subsistencia es causante de la
pobreza.” “La agricultura y el comercio de subsistencia
significan la diferencia entre la vida y la muerte para centenares de
miles de millones de personas.” Pero, en la lógica capitalista, “la
tierra sólo es buena si se sitúa bajo el control de los bancos y de las
relaciones monetarias”
Es lo que ha sucedido con los microcréditos: “Los préstamos se otorgan a grupos de mujeres -vecinas, amigas- que antes eran un sistema de apoyo mutuo. Así que cuando les dan un préstamo al grupo, cada una de las mujeres es responsable. Si tú no pagas, yo te voy a perseguir, voy a ser la que te vigile y persiga. Así, has pasado de ser parte de mi grupo de apoyo a mi policía. Incluso se ha mostrado en muchas casos como esta es la causa del incremento de violencia entre mujeres porque cuando una no paga el resto van a ir a su casa, a criticarla e, incluso, a darle una paliza. Así que ha habido un incremento de la violencia, incluso de la violencia entre mujeres, como resultado de los microcréditos. (…)
Es lo que ha sucedido con los microcréditos: “Los préstamos se otorgan a grupos de mujeres -vecinas, amigas- que antes eran un sistema de apoyo mutuo. Así que cuando les dan un préstamo al grupo, cada una de las mujeres es responsable. Si tú no pagas, yo te voy a perseguir, voy a ser la que te vigile y persiga. Así, has pasado de ser parte de mi grupo de apoyo a mi policía. Incluso se ha mostrado en muchas casos como esta es la causa del incremento de violencia entre mujeres porque cuando una no paga el resto van a ir a su casa, a criticarla e, incluso, a darle una paliza. Así que ha habido un incremento de la violencia, incluso de la violencia entre mujeres, como resultado de los microcréditos. (…)
"Claramente, cualquier poder que podamos tener va a ser el que construyamos, no el que nos otorgue el Estado.” "La cuestión es cómo reclamar esa riqueza sin darle al Estado el poder de organizar nuestra vida o validar su figura como protector y fuente de cohesión y bienestar social.”
Fuente y extractos del libro:
Calibán y la bruja. Mujeres, cuerpo y acumulación originaria. Silvia Federici.
Para leerlo, aquí: http://www.lahaine.org/index.php?p=30300
http://depoliticaehistoria.
http://www.publico.es/
http://info.nodo50.org/La-