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martes, 27 de agosto de 2024

Eufemismos para la muerte o el morir, a lo largo del mundo.

El único hecho universal de la vida es la muerte. Sin embargo, diferentes culturas definen y reaccionan a la muerte de manera tan diversa que los acontecimientos que la rodean son un indicador clave de la exuberante inventiva de cada sociedad. Algunas reaccionan con bromas y humor, otras con grandes lloros. Otras con bailes jubilosos y las hay con vídeos post mortem. También están las que sacan a los difuntos de paseo tiempo después. 

Según el Diccionario de la lengua española, un eufemismo es una «manifestación suave o decorosa de ideas cuya recta o franca expresión sería dura o malsonante». En algunos casos, los caminos de pensamiento son intrincados...

 

EUFEMISMOS PARA LA MUERTE O EL MORIR, A LO LARGO Y ANCHO DEL MUNDO.

El cuerpo pide tierra.

Ponerse el pijama de palo/madera.

Machacar hormigas con el caletre. 

Hincar el poleo.

Se fue con la mayoría.

Está mirando las flores desde abajo.

Está chupando gladiolo. / Se fué al barrio de los acostados. / Se lo llevó la pelá. 

Está haciendo bocalagarto. Más cerca del arpa que de la guitarra. 

Dejó de fumar. 

Entregó la cuchara. 

Dobló la servilleta. 

Se fue pal corral de los quietos / pal cortijo de los callaos / al solar de los calladitos. 

Está roscando las escarbaderas. (Escarbadera son las patas de las gallinas, que muertas, tienen las garras hacia adentro, se enroscan)

No escuchará el siguiente cuco.

Se ha ido al pueblo de los topos.

Está entre las tres piedras. (El dolmen)

En Polonia: se cayó de la bici / Pateó el calendario.

Dinamarca: la última camisa no tiene bolsillos.

En Haiti: se fue a la tierra de los sin sombreros.

China: extinguió las preocupaciones / Vendió huevo de pato salado.

Vietnamita: entró en el sueño de los mil otoños. 

Esloveno: se fue a silbar a los cangrejos.

Cuba: cantó el manisero / Se mudó al barrio Bocarriba.

(Espera un momento... ¿Silvar a los cangrejos?)

ANÉCDOTAS, A PROPÓSITO DE TODO ESTO, DEL ANTROPÓLOGO NIGEL BARLEY. 


"- ¿Donde está tu mujer, Taab gaay?

- Murió anoche.

Me quedé de piedra. Él parecía tomárselo con mucho aplomo.

- ¿Y cómo fue?

- Sencillamente estaba caminando, se mareó y murió.

Balbuceé un pésame y mientras lo hacía, Pascal miró por encima de mi cabeza, saludó con la mano y sonrió. Levantando la vista, vi a su mujer bajando lentamente por la carretera. Sentí un acceso de ira por haber sido objeto de una broma tan estúpida. Entonces me acordé. Entre los dowayo, se describe a cualquiera que se desmaya o cae en coma como "muerto"; la muerte es algo mucho menos preciso que entre nosotros. Abundan las historias de gente que ha resucitado después de que empezaran a envolver sus cuerpos."


Y otra más:

"¿Sabes lo que es esto?", dijo mi anfitrión estirándose para dar una palmada a un bulto que tenía en un rincón de su cuarto de estar. Parecía un montón de ropa vieja. "Es mi abuela" ¿No vas a saludarla?

- Encantado de conocerla, abuelita. Resultaba difícil hacer un gesto: estrecharle la mano era imposible, pero darle una palmada al bulto hubiese sido una muestra de confianza excesiva. 

-Vaya, eso ha estado bien. 

- ¿Cuánto tiempo lleva muerta? 

- Nosotros no decimos eso. Está "durmiendo" o "tiene dolor de cabeza". No morirá hasta que abandone la casa. Ya lleva durmiendo tres años.
Se puso de puntillas y bajó un enorme radiocassette para entretenerme con algo de música. Me di cuenta de que las cintas estaban almacenadas en orden alfabético sobre el cuerpo, que resultaba una estantería muy cómoda.

- La echarás en falta cuando muera.-dije."

 

Nigel Barley, en su libro Bailando sobre la tumba, escribe que el único hecho universal de la vida es la muerte. Pero "en Occidente ninguna muerte se considera real sin un certificado que explique la causa de defunción. Si uno muere debido a un paro cardíaco y le reaniman, no se expide certificado alguno. Cada uno de los síntomas de la muerte (falta de respiración o pulso, frialdad y rigos mortis, relajación de esfínteres, insensibilidad ante los estímulos eléctricos) pueden darse sin que se produzca la muerte. El único signo seguro y certero de la muerte es el comienzo de la putrefacción del cadaver. Así que ahora ya ni siquiera sabemos dónde comienza la vida y la muerte; sus fronteras son redefinidas periódicamente."

 

viernes, 3 de noviembre de 2023

"Cuenta, pajarita, cuenta": un cuento palestino de sumud.

"Si los cuentos representan una radiografía de nuestra cultura, entonces, el tratamiento que en ellos se hace de la figura femenina contiene grandes dosis de realidad." 
Sharif Kanaana, antropólogo.

El profesor Kanaana, nacido en Arraba, en las colinas de Galilea, al Norte de Nazaret, en lo que por entonces era Palestina y hoy es Israel, emigró a Estados Unidos en 1961, donde fue profesor en distintas universidades. En 1976 regresó a Palestina, donde ha sido rector de la universidad An-Najah (Nablus) y director del departamento de Sociología y Antropología de la Universidad de Bir-Zeit (Ramala). Es autor de un muy documentado y extenso trabajo sobre las 450 aldeas destruidas, borradas de la faz de la tierra en 1948, por el ejército de Israel. 
El libro "Cuenta, pajarito, cuenta" de Sharif Kanaana son propiedad colectiva de la comunidad palestina y su voz es la voz de la comunidad.

"Antes de la llegada de la televisión, los cuentos tradicionales eran la forma más popular de pasar el rato (...) para reforzar los lazos sociales". "Cuando las mujeres de edad se convierten en cuentacuentos, significa que la sociedad ha reconocido ya su autoridad y la sabiduría y la experiencia de la vida que esta implica; y, en su manera de narrar, la franqueza de su planteamiento, su tono poco convencional y la concisión serán las cualidades más notables"
 
"La mayoría de los cuentos tienen títulos femeninos y los personajes principales y más activos son las mujeres." 
"Los héroes son siempre heroínas: madres, hijas, esposas"

Perseverancia. Sumud صمود

 
Si los olivos conociesen las manos de los que los sembraron, su aceite se convertiría en lágrimas.
¡Oh! Sabiduría de los antepasados,
Nuestro cuerpo para vosotros sera un armadura.
Limpiaremos las espinas con nuestras pestañas
Y cortaremos la tristeza
Hasta arrancarla de nuestra tierra.
El olivo conservará su color verde para siempre
Y volverá a la tierra como una arma.

Mahmoud Darwish. Poeta palestino.

El olivo es un símbolo de "sumud", que significa firmeza, perseverancia, constancia, resistencia, en árabe, por ser muy resistente al fuego o a las sequías. Sus raíces son muy robustas y capaces de regenerar el árbol cuando la estructura aérea se estropea o destruye. El arraigo fuerte.
Los árboles de Hebrón son algunos de los más antiguos de Palestina, que data de la época romana. Esta cosecha es una antigua tradición que constituye una parte vital de la cultura palestina.
Los colonos los incendian, los talan... pero ellos, dicen, resurgirán.

 
LA PAJARITA

   Érase una vez, queridos míos, una pajarita que decidió hacer un pozo y se puso a escarbar y escarbar hasta que sus manos estuvieron completa­mente teñidas de alheña. Pero la pajarita siguió es­carba que te escarba hasta que, al cabo de un rato, vio que la alheña había teñido también sus patas y sus pies. Asombrada, levantó sus ojos al cielo, y Dios, que llevaba un rato mirándola, decidió gas­tarle una última broma y pintar sus ojos de kohol, pero como la pajarita no se daba cuenta de lo que estaba pasando siguió escarbando y escarbando... de repente, ¡PLASH!, encuentra un cofre y, ¡uAuuu!, cuando al fin consigue abrirlo, ¿qué es lo que ve? Una preciosísima tela suave y brillante como la seda.

   —¡Anda! ¿Qué podría hacerme yo con esta tela? —exclamó.
   Pensó, pensó y pensó y... enseguida encontró la solución.

   —¡Ya está! Me voy a hacer un vestido.

   Y salió volando a buscar a su modista (que también era una pajarita) y, nada más llegar, le dijo:
   —Había pensado hacerme dos vestidos, uno sería para mí y el otro para ti. ¿Qué te parece?

   La pajarita modista aceptó encantada, y ese mismo día se puso a trabajar. No había pasado ni una semana cuando vio aparecer de nuevo a su clienta:
   —A ver, a ver —piaba la pajarita—. ¿Cómo te han quedado esos vestidos?

   La modista fue a buscar los vestidos para que los viera y entonces.., la pajarita se lanzó sobre ellos como una flecha, los cogió con el pico y salió vo­lando. A continuación, volvió a su pozo para seguir escarbando, hasta que de repente, ¡oh sorpresa!, en­contró un nuevo cofre y, en su interior, una precio­sa tela de algodón como la que utilizan las señoras para hacer los pañuelos. La pajarita fue enseguida a visitar a su modista pero, esta vez, le pidió que le hiciera dos pañuelos.

   Y no había pasado una semana cuando la pa­jarita regresó a buscarlos:
   —A ver, a ver —piaba la pajarita—. ¿Podrías enseñarme cómo te han quedado los pañuelos?

   La pajarita modista fue a buscar los pañuelos para que su clienta los viera y entonces.., la pajarita se lanzó sobre ellos como una flecha y, después de cogerlos con el pico, salió volando. A continuación volvió a su pozo para seguir escarbando y, de pron­to, ¡oh sorpresa!, encontró un nuevo cofre y, en su interior, una bolsa de lana.

   ¡Pero qué lana más estupenda! —se dijo—; encargaré que me hagan un colchón.
   Esta vez fue volando al colchonero y pidió que le hiciera dos colchones:
   —Uno será para ti y el otro para mí. ¿Estas de acuerdo?

   El colchonero estaba de acuerdo. A los pocos días la pajarita regresó a buscarlos y nada más ver­los se lanzó sobre ellos y después de cogerlos con el pico, salió volando y cuando llegó a su nido en un árbol, los dobló con cuidado y se hizo una especie de sillón y muy contenta, antes de sentarse, se pu­so sus dos vestidos, uno encima del otro, y sus dos pañuelos, también uno encima del otro, y, así arre­glada, con las manos y los pies teñidos de alheña y los ojos pintados de kohol, la pajarita imaginó ser una preciosa novia.

   Y en esas estaba cuando acertó a pasar por allí el hijo del sultán, que iba de caza con su escopeta al hombro. Nada más verlo, la pajarita se puso a cantar:
   —La, la, la... hoy es fiesta y por eso me he puesto mis vestidos nuevos. La, la, la... llevo enci­ma todos mis vestidos nuevos.

   Cuando el hijo del sultán la oyó cantar, se echó la escopeta a la cara, levantó la vista hacia las copas de los árboles y cuando la tuvo a tiro, disparó. Dis­paró, pero no le dio. Y la pajarita casi se muere de la risa:
   —¡Jajajá! ¡No tienes ni idea, chaval! ¡Jajajá!

   Al ver que la pajarita se estaba riendo de él, el hijo del sultán se enfadó muchísimo y decidió que no se iba de allí sin cazarla. Cuando, después de muchos tiros, lo consiguió, la agarró por el pescue­zo y empezó a desplumarla. Pero, incluso mientras la desplumaba, la pajarita seguía cantando:
   —¡Vaya, vaya! ¡Hay que ver qué valiente es el señor desplumador! —piaba sin parar la pajarita—. ¡Pero qué valiente!

   El hijo del sultán, que nunca había soportado que se burlaran de él, ordenó que la metieran en un puchero y, como le gustaba mucho cocinar, él mismo se la preparó en pepitoria. Aun así, la paja­rita seguía cantando:
   —La, la, la, ¡qué gran cocinillas estás tú hecho! La, la, la, ¡qué gran cocinillas!

   Le salió tan rica que en un pispás se la comió, pero cuando terminó, el hijo del sultán sintió ganas de ir a hacer caca, y entonces, ¡oh milagro!, después del primer apretón salió la pajarita cantando:
   —¡Puuuafl, ¡qué mal rato he pasado ahí den­tro! Y encima,.. ¡he tenido que verte el agujero del culo!, pues que lo sepas, por más que seas hijo del sultán lo tienes tan feo como el de los demás, tan feo y tan rojo como un carbón encendido.

   Y colorín colorado este cuento se ha acabado.

viernes, 28 de julio de 2023

Malut dé, malut kita: trolleando a antropólogos.

 "La gente tiene una manera descuidada de hablar de un 'mentiroso nato', tal como se habla de un poeta nato. Pero en ambos casos, están equivocados. La mentira y la poesía son artes (artes, como vio Platón, no desconectadas entre sí), y requieren del estudio más cuidadoso, la devoción más desinteresada."

Oscar Wilde. La decadencia de la mentira.


Napoleón Chagnon, antropólogo, dio una descripción bastante cómica de su intento de recopilar genealogías de los yanomamö:

Nada extraño, teniendo en cuenta que se centró en las enemistades: "comencé a aprovecharme de las discusiones y enemistades locales a la hora de seleccionar a mis informantes”, escribe. En su libro Nobles Salvajes, Chagnon admite que “los yanomamö no querían que supiera sus nombres… [y]… no querían que los usara en público”. Estaba “decidido a entender su sistema social… pero ellos estaban igual de decididos a esconder esos datos”.

Y continúa:


"Reaccionaron a esto de una manera brillante pero devastadora: inventaron nombres falsos para todos en el pueblo y los aprendieron sistemáticamente, revelándome libremente las identidades de todos. Con aire de suficiencia pensé que había descifrado el sistema y construido con entusiasmo genealogías elaboradas durante un período de unos cinco meses. Disfrutaron verme aprender sus nombres y relaciones de parentesco. Ingenuamente supuse que obtendría la "verdad" de cada pregunta y la mejor información. Esto sentó las bases para convertir mi serio proyecto en un divertido engaño de las más grandes proporciones. Cada "informante" intentaría superar a sus compañeros inventando un nombre aún más absurdo o ridículo que el que alguien me había dado antes, explicándolo como "bueno, él tiene dos nombres y este es el otro". Incluso fabricaron relaciones genealógicas diabólicamente improbables, como que alguien se casara con su abuela, o peor aún, con su suegra, una perspectiva grotesca y aterradora para los yanomamö. Recopilaría los nombres y relaciones deseados haciendo que mi informante susurrara el nombre de la persona en voz baja en mi oído, notando que él o ella era el padre de tal o cual o el hijo de tal o cual, y así sucesivamente. Todos los que estaban observando mi trabajo insistían entonces en que repitiera el nombre en voz alta, rugiendo de risa histérica mientras pronunciaba torpemente el nombre, a veces riéndose hasta que las lágrimas corrían por sus rostros. La persona "nombrada" por lo general reaccionaba con molestia y me siseaba algún epíteto intraducible, lo que servía para asegurarme de que tenía el nombre "verdadero". Concienzudamente revisé y volví a verificar los nombres y las relaciones con múltiples informantes, complacido de ver desaparecer las inconsistencias a medida que mis hojas genealógicas se llenaban con esos pequeños triángulos y círculos deseables, miles de ellos.

Mi burbuja antropológica estalló cuando visité un pueblo a unas 10 horas de camino al suroeste de Bisaasi-teri unos cinco meses después de haber comenzado a recolectar genealogías en Bisaasi-teri. Estaba charlando con el líder local de este pueblo y casualmente solté el nombre de la esposa del líder de Bisaasi-teri. Siguió un silencio atónito, y luego un rugido de risas incontrolables, asfixia, jadeos y aullidos en todo el pueblo. Parece que pensé que aquel jefe estaba casado con una mujer llamada 'vagina peluda'. También parece que el jefe de Bisaasi-teri fue llamado 'largo pene' y su hermano 'mierda de águila'. El jefe de Bisaasi-teri tenía un hijo llamado 'gilipollas' y una hija llamada 'aliento de pedo'."

A Evans Pritchard también le sabotearon su trabajo. Sufrió lo que definió como "Nuerosis" (me pregunto si los nuer lo definieron como 'Pritchariosis'):

"Los nuer son expertos en sabotear una investigación y hasta que uno ha residido con ellos durante algunas semanas, obstinadamente atontan todos los esfuerzos por obtener los hechos más simples y dilucidar las prácticas más inocentes. He obtenido en Zandeland más información en unos pocos días que la que obtuve en Nuerland en otras tantas semanas. Después de un tiempo, la gente estaba dispuesta a visitarme a mi tienda, a fumar mi tabaco y hasta a bromear y charlar, pero no estaban dispuestos ni a recibirme ni a discutir asuntos serios. Las preguntas sobre costumbres fueron bloqueadas por una técnica que puedo recomendar a los nativos que están molestos por la curiosidad de los etnólogos. El siguiente ejemplo de los métodos Nuer es el comienzo de una conversación en el río Nyanding (...):

Yo: quien eres?

Cuol: Un hombre.

Yo: ¿Cuál es tu nombre?

Cuol: ¿Quieres saber mi nombre?

yo: Sí.

Cuol: ¿Quieres saber mi nombre?

E: Sí, has venido a visitarme a mi tienda y me gustaría saber quién eres.

Cuol: Está bien. Soy Cuol. ¿Cómo te llamas?

E: Mi nombre es Pritchard.

Cuol: ¿Cómo se llama tu padre?

E: El nombre de mi padre también es Pritchard.

Cuol: No, eso no puede ser cierto. No puedes tener el mismo nombre que tu padre.

E: Es el nombre de mi linaje. ¿Cuál es el nombre de tu linaje?

Cuol: ¿Quieres saber el nombre de mi linaje?

E: Sí.

Cuol: ¿Qué harás con él si te lo digo? ¿Lo llevarás a tu país?

E: No quiero hacer nada con eso. Solo quiero saberlo ya que estoy viviendo en tu campamento.

Cuol: Oh bueno, somos Lou.

E: No te pregunté el nombre de tu tribu. Lo sé. Te estoy preguntando el nombre de tu linaje.

Cuol: ¿Por qué quieres saber el nombre de mi linaje?

E: No quiero saberlo.

Cuol: ¿Entonces por qué me lo pides? Dame un poco de tabaco.


Desafío al etnólogo más paciente a abrirse camino contra este tipo de oposición. Uno simplemente se vuelve loco. De hecho, después de unas pocas semanas de relacionarse con los Nuer, uno muestra, si se permite el juego de palabras, los síntomas más evidentes de 'Nuerosis'."

Peter Metcalf escribió todo un libro sobre este tema: "Ellos mienten, nosotros mentimos". En realidad, es la fórmula de apertura utilizada por cualquier anciano o anciana de Berawan (Sarawak, Borneo) para comenzar la narración de una epopeya sagrada (malut dé, malut kita). Una manera de sugerir que lo que se va a transmitir es la repetición de lo que le ha sido transmitido por los antepasados.
El antropólogo comienza el libro analizando la crítica posmoderna nihilista que ha cuestionado la veracidad de los relatos antropológicos:

"(...) la antropología tiene una larga tradición de relativismo, es decir, la insistencia en que otras visiones del mundo se tomen en serio, en sus propios términos, y no se descarten como errores. Cierto, ha habido escuelas de antropología que no han sido relativistas, y existen limitaciones al relativismo, pero la estrategia permanece. Sin embargo, cuando se dice que los posmodernistas "relativizan" sus afirmaciones de saber, sugieren una versión antropológica especial del nihilismo, la afirmación de que es fundamentalmente imposible saber algo o decir algo acerca de otra cultura. Esto puede conducir a una especie de esencialismo introvertido, que autoriza a los etnógrafos sólo a trabajar en "su propia cultura", independientemente de cómo se construya. De esta manera, se invierte la estrategia tradicional de la antropología de sacar a las personas de sí mismas."

Así pues, zanja Metcalf, tal vez sea mejor escribir sobre mentiras, tanto las que los informantes cuentan a los antropólogos como las que se cuentan en los relatos antropológicos: "mentiras blancas y negras como la noche, evasiones, exageraciones, engaños, verdades a medias y negaciones creíbles".

"En un entorno desconocido, el o la antropóloga suele ser socialmente inepto y, a menudo, lingüísticamente incompetente. Tales personas generalmente se evitan. Sin embargo, las etnografías están llenas de informantes complacientes, que se apresuran a hacer el papel de Sancho Panza para el Don Quijote del etnógrafo. Tenemos que preguntarnos qué transacciones de poder y conocimiento subyacen a sus motivos."






 

martes, 2 de mayo de 2023

La risa que mata: antropología del humor subversivo

"No con la cólera, sino con la risa se mata ¡Adelante, matemos el espíritu de la pesadez!" 

(Así habló Zaratustra. Friedrich Nietzsche.)

"Omumneepo". Así llaman a los ataques de risa en Tanzania.

En 1962, un asombroso ataque de risa se extendió a través de un internado de niñas en el pueblo de Kashasha. Entre enero y marzo de este año,159 alumnas se matricularon en Kashasha College (la primera escuela para niñas en la región dirigida por misioneros suizos y alemanes de la Iglesia Evangélica Luterana). Tres niñas comenzaron a reírse... y se expandió por toda la escuela, llegando a afectar a 95 de las 159 alumnas de entre 12 y 18 años.​ Las estudiantes eran incapaces de concentrarse en sus clases. Ante tal magnitud del problema, la escuela se vio obligada a cerrar el 18 de marzo de 1962.

Después de que la escuela cerrara y las alumnas fueran enviadas a sus casas, la epidemia se extendió a Nshamba, un pueblo que hospedaba a varias de las chicas. En abril y mayo, 217 personas tuvieron ataques de risa en el pueblo, la mayoría niños en edad escolar y adultos jóvenes. La escuela de Kashasha reabrió el 21 de mayo pero volvió a cerrar a finales de junio. La epidemia llegó a la escuela media para mujeres de Ramashenye, cerca de Bukoba, donde afectó a 47 muchachas. Otro brote tuvo lugar en Kanyangereka, y dos escuelas infantiles cercanas fueron cerradas. Entre seis y dieciocho meses después de su inicio, el fenómeno se extinguió. En total cerraron 14 escuelas y alrededor de mil personas se vieron afectadas.

La antropóloga Inès Pasqueron de Fommervault, especializada en la cuestión del cuerpo y los afectos, insiste en que las normas socioculturales condicionan las prácticas y representaciones de la risa. Su investigación de campo se realizó primero en Paraguay, y después hizo trabajo de campo sobre Tanzania. En su tesis, explica que en Kashasha, la risa “impulsiva” siempre debe expresarse fuera de la vista y retenida “dentro del corazón” (“moyoni”). Para esta sociedad es imperativo aprender a controlar su expresión, que sigue modulando el estatus y los contextos sociales... en especial, en el caso de las mujeres.

"Las jóvenes solteras, deben todavía y más que nunca expresar vergüenza y sofocar su risa. En su caso, la risa es la marca de una libertad que va en contra de la pasividad y sumisión de la que deben hacer gala. (...) Una mujer vergonzosa, discreta y “cerrada” representa pues el paroxismo de la virtud
femenina, del cual la omugole (la joven novia) es su misma personificación."

"No podía concebirse la idea de que las jóvenes adolescentes en 1962 se habrían tomado la libertad de reír, es decir, de “abrirse” en un espacio público, frente a personas mayores y, además, frente a hombres. Desde el momento en que son considerados víctimas de la risa incontrolable, "de una epidemia", su risa ya no parece fuera de lo común ni transgresora, sino sólo enfermiza: se conserva el orden social y se mantiene su condición de individuos débiles y pasivas." "Me parece, sin embargo, que lo que se está gestando detrás de estas risitas o estas risas locas son voluntades individuales y colectivas." 

"A nadie se le ocurrió que las alumnas habían estallado en carcajadas en un estallido de alegría súbitamente permitida y que esos cuerpos risueños, por muy locos que se hubieran vuelto, eran la libre expresión de las jóvenes que actuaban en contra de las normas y reglas impuestas por su género e identidad. Se trataría finalmente de admitir que estos cuerpos que reían, eran el reflejo de una autoconciencia en formación. El omumneepo sería entonces testimonio de la fuerza liberadora de la risa, que es capaz de jugar con todas las limitaciones sociales en un momento."

La risa como mecanismo de pugna, una manera de afrontar el conflicto, siempre es más o menos transgresora, trastorna normas y estructuras e incluso las cuestiona. Así, si la risa puede garantizar el orden social, también tiene el poder de derrocarlo. Es el humor revolucionario, el humor subversivo, y la imaginación humana.


Hay una historia nigeriana que dice así:

Un hombre muere y va al infierno. Allí descubre que hay un infierno diferente para cada país. Va primero al infierno alemán y pregunta '¿Qué hacen aquí?' Le dicen: 'Primero te ponen en una silla eléctrica durante una hora. Luego te acuestan en una cama de clavos durante otra hora. Entonces entra el demonio alemán y te azota durante el resto del día." Al hombre no le gusta nada como suena eso, así que sigue adelante. Revisa el infierno de EE. UU., así como el infierno ruso y muchos más. Descubre que son más o menos iguales. Luego llega al infierno nigeriano y descubre que hay una cola muy larga de gente esperando para entrar. Asombrado, pregunta: '¿Qué hacen aquí?' Le dicen: 'Primero te ponen en una silla eléctrica durante una hora. Luego te acuestan en una cama de clavos durante otra hora. Entonces entra el demonio nigeriano y te azota durante el resto del día. 

- Pero eso es exactamente lo mismo que todos los demás infiernos: ¿por qué hay tanta gente esperando aquí para entrar?

- Porque aquí nunca hay electricidad, entonces la silla eléctrica no funciona; alguien robó todos los clavos; y el diablo es un funcionario público, así que entra, pasa la tarjeta de fichar y luego regresa a su casa...

 
El humor subversivo es ese humor capaz de romper las reglas establecidas mostrando las arbitrariedades del poder, y puede tener algunas fórmulas universales, pero a la vez, es un fenómeno local que permanece íntimamente vinculado al contexto. La risa y el sentido del humor son un sentido tan social como el sentido común. Por eso, el humor puede ser disruptivo revolucionario, y acompaña al nacimiento de un mundo nuevo. No en vano, la palabra "comedia" viene del griego κωμῳδία (komedia), de la palabra κωμός (komos = desfile, procesión victoriosa, o canción de triunfo).

El antropólogo David Graeber escribió que: "El contrapoder hunde sus raíces en primer lugar y sobre todo en la imaginación" (Fragmentos de una antropología anarquista). Y es así con el humor, tiene que ver con la iniciativa y la innovación: con el momento en que alguien descubre un patrón oculto en el entorno que nos rodea. El cerebro convence al descubridor con una descarga de endorfinas que produce una enorme satisfacción. Que es precisamente la que nos causa una buena carcajada. Achille Mbembe, historiador camerunés, asegura sin embargo, que 'la risa es inseparable del miedo inspirado por el presente inmediato', uno caracterizado por una profunda incertidumbre. (Figuras del sujeto en tiempos de crisis)

Pero el humor es a la vez, arma y escudo. Hay una frase que dice: “Una persona sin sentido del humor es como un carro sin resortes. Es sacudido por cada guijarro en el camino.”

"El humor es nuestra respuesta natural a vivir en un mundo lleno de conflictos", escribe Scott Weems, neurocientífico cognitivo en su libro "Ja. La ciencia de cuándo reímoa y por qué". "Entonces se darán cuenta de por qué el humor no sigue guiones ni reglas sencillas, y por qué no hay un solo chiste que le agrade a todo el mundo. El humor es idiosincrásico porque depende de aquello que hace que todos seamos únicos: cómo nos enfrentamos a la discrepancia que reina en nuestro complejo cerebro."

Por eso, asegura, "el humor es como el ejercicio del cerebro, (...) obligan a nuestro cerebro a llevar a cabo nuevas asociaciones y a afrontar la confusión de frente."

Ojo! el humor es también indicativo de la adaptación, porque revela un mundo común, esos ciertos códigos para interpretar las normas y las transgresiones de esas normas. Y si la risa es contagiosa y nos hace cómplices, el humor, además, es una crítica cultural que es también compartida.
“Los que se ríen se transforman en conjunto como las olas del mar” escribió George Bataille. Genera comunidad. La risa siempre está junto a la fiesta y el juego, los que a su vez pertenecen a la esfera del arte.

Hay un proverbio etíope que dice así: “Cuando el gran señor pasa, el campesino sabio hace una reverencia profunda y se tira un pedo silencioso”.


O quizás, el campesino sabio le hace frente, como cuenta el mulá Nasrudin. Sí, ese que aparece tantas veces en mis libros:


Se cuenta que un día soleado, Nasrudin se fue a comprar un asno.
 La feria de los asnos estaba en su momento álgido entre una multitud de campesinos. En medio del barullo reinante, le oyó afirmar a uno de la élite que allí no había más que burros y campesinos. Nada más.
- ¿Eres campesino tú también? – le preguntó Nasrudin.
- ¿Yo? No ..
A lo que Nasrudin concluyó: ¡Ah, entonces, no me digas más!


El antropólogo James C. Scott escribe en su libro "los dominados y el arte de la resistencia":
"Todo grupo subordinado crea, a partir de su calvario, una transcripción oculta que representa una crítica al poder pronunciada a espaldas del dominante... Sugiero, en este sentido, cómo podríamos interpretar el rumor, el chisme, los cuentos populares, las canciones, los gestos, las bromas y el teatro de los impotentes como vehículos a través de los cuales, entre otras cosas, insinúan una crítica al poder escondiéndose tras el anonimato o tras inocuas comprensiones de su conducta." Scott las describe como una esfera de "infrapolítica" que es ese espacio invisible de posible resistencia a la dominación y la captura.

“La broma es la hermana pequeña de la verdad”
, afirma un proverbio congoleño.

"No hice ninguna diferencia entre reírme de algo y obtener su verdad, por lo general era la existencia de "lo que es" y de mí mismo lo que me hacía reír."
(Bataille, 1954: 231)

Hay un monólogo del comediante Aamer Rahman que lo divulgo siempre que en alguno de mis comentarios me critican con eso de "racismo inverso". Y además resulta ser un viaje muy excitante por la historia. Me parece buenísimo como ejemplo de que la imaginación en el arte de la comedia, es una herramienta maravillosa para la educación. Él cuenta:

"Mucha gente blanca me dice: “Oye, Aamer, escucha. Te subes al escenario, haces tus bromas sobre los blancos, dices "La gente blanca esto, la gente blanca lo otro...". ¿Y si hiciera algo así, eh? ¿Qué pasa si me subo al escenario y digo "los negros son así, los musulmanes son de esta manera...”. Probablemente me llamarías racista, ¿no? Y yo digo: 'Sí, sí, te lo llamaría'...
Dicen: Vale, haces tus bromas sobre los blancos. ¿No crees que eso es una especie de racismo? ¿No crees que eso es... dun dun duuun... racismo inverso? Dije: "No, no creo que eso sea racismo inverso"... Pero creo que podría existir el racismo inverso, y puedo ser un racista inverso, si quisiera.
Todo lo que necesitaría sería una máquina del tiempo. Y lo que haría sería entrar en mi
máquina del tiempo y retroceder en el tiempo antes de que Europa colonizara el mundo. Y convencería a los líderes de África, Asia, Medio Oriente, América Central y del Sur para invadir y colonizar Europa. Solo ocúpalos, roba sus tierras y recursos.
Estableceríamos una especie de comercio de esclavos trans-asiático, no sé, donde exportamos gente blanca para trabajar en plantaciones gigantes de arroz en China. Simplemente arruinamos Europa en el transcurso de un par de siglos, para que todos sus descendientes quieran emigrar y vivir en los lugares de donde provienen los negros y los morenos. Por supuesto, en ese momento, me aseguraría de establecer sistemas que privilegien a las personas negras y morenas en todas las oportunidades sociales, políticas y económicas imaginables. Y los blancos nunca tendrán ninguna esperanza de autodeterminación real.
Cada dos décadas inventaríamos una guerra falsa como excusa para bombardearlos de regreso a la Edad de Piedra y decir que es por su propio bien porque su cultura es inferior.
Y solo por diversión, someteríamos a las personas blancas a los estándares de belleza de las personas de color, para que terminen odiando el color de su propia piel, ojos y cabello. Si, después de cientos y cientos y cientos de años de eso, subiera al escenario en un espectáculo de comedia y dijera: “Oye, ¿qué pasa con los blancos? ¿Por qué no pueden bailar? Eso sería racismo inverso."
(Rahman 2013).


Fuentes:
Inès Pasqueron de Fommervault. Pour une anthropologie du rire. Les cadres de l’expérience du corps
riant dans les villages la Kagera (Nord-Ouest de la Tanzanie). Sciences de l’Homme et Société. AMU
- Aix Marseille Université, 2019. Français. ￿

sábado, 4 de marzo de 2023

No es mi circo, no son mis monos: expresiones divertidas en todo el mundo.

"No es mi circo, no son mis monos", así lo expresan en Polonia (y ahora en todo el mundo, en realidad) un "me importa un bledo", "un comino", "un carajo", "un pimiento"...

El escritor Adam Sharp @AdamCSharp explica que esta expresión ya está muy manida, y aún así, en sus innumerables listas de expresiones y dichos populares de todo el mundo, siempre está en comentarios. Es la magia de twitter. 
Pero hay más, y añado yo también:

En francés "no son mis cebollas". En Bulgaria: no es cuchara para mi boca". "No es mi olla de sopa", dicen en Nigeria. En Libia y Tunez: no es mi clima.
"No es mi dolor de cabeza", en finés. "El agua no me cubre", dicen en Japón.

"No me guiña el ojo".
"No me peina".
"No me voy a tirar al viento por ello", son las expresiones que puedes oír en Rumanía.

"No es la semilla con la que siembro", en xhosa.

En Egipto: "no come conmigo". Hungaria: "no es mi mesa".

"No gira mis ruedas", o "no enciende mi tractor": Australia y Nueva Zelanda.

"No son mis habas, no es mi jardín", en Lituania. En malayo se puede decir "no es mi campo".

"No me provoca", es una manera de expresarlo en Colombia.

"Como oír tos de chivo a medianoche", decimos en euskera, País Vasco, cuando escuchamos algo... que ni nos va ni nos viene. "Como las noticias del capelán", dirían en Islandia. "Le interesa a mi abuela", te dicen en hebreo. "Eso no me importa ni a mi, ni a mi oreja", en swahili. En Filipinas te piden que se lo cuentes a una tortuga, y en Italia, lo hablarán con el caballo.

"No es nuestro camello" es un antiguo proverbio árabe. Dicen que lo dijo Al Hareth ibn Obad porque no quería involucrarse en la guerra.

"A chillidos de marrano, oídos de carnicero", dicen en México.

'Tu árbol, mi árbol' en idioma malayo, en dialecto Negeri Sembilan.

"No cosecha mis papas", te responden en danés antiguo.
No es mi taza de té (Reino Unido).
No es mi playa (Brasil).
No es mi cuento de hadas (Polonia).
No es mi plato (China).
No es santo de mi devoción (España).
"Esa no es mi cerveza", te espetan en alemán.
"No es mi pluma", en turco.

También podemos decir que esas noticias nos dejan "como las vacas mirando al tren". Así lo decimos en español, y también en turco.
Pero en Alemania, dicen "como una vaca cuando hay relámpagos".
"Como un carnero mirando la puerta nueva", en ruso. "Como un gato mirando un calendario", en Rumanía. "Como una cabra mirando un lago", en irlandés, y "como una gallina que ha encontrado un cuchillo", en Francia. ¡Qué imaginación!

Pasemos a otro tipo de expresiones. Es tan jactancioso y presumido que..:



"Si fuera chocolate se comería a sí mismo", puedes escuchar en irlandés.
Es como un gallo encima de la pila de basura (finlandés).
Cree que salió del muslo de Júpiter (francés).
En zulú, dicen: "Le gusta que lo miren como a una cabra de pelo largo", o "como a un Isakabuli (que es el pájaro viudo o Euplectes progne).

Llueve a baldazos, a cántaros, jarrea y caen chuzos de punta.
Pues en holandés, lo que caen son boquillas de pipas. "Está lloviendo uñas" o "llueve lo suficiente para beber de pie" se quejan en Canadá.
En Austria, llueven sogas. Piedras caen en Egipto.
En Estonia "está lloviendo como de un tallo de habas", de tanta agua que retienen sus hojas.
"Está lloviendo como agua que se vierte de una calabaza", dicen en hausa, África Occidental.
"Están lloviendo aprendices de zapatero", o "perros y gatos", en alemán. Hachas caen si es en Croacia, y navajas en Brasil. Aunque en Brasil también puedes escuchar que lo que cae, es cacao.
(Ojalá que llueva café en el campo, ♫♬♪♩𝄞...)
En Suecia, llueve como como "barras que sobresalen del suelo".
En Noruega, están lloviendo pequeños demonios; o mujeres trolls, si te gustan las expresiones clásicas.

"Se van a ahogar las ranas", dicen en asturiano.
Llueven carretillas en Eslovaquia. O como una vaca meando, en Francia. Y eso es muuuucho.
"Está cayendo una inundación", en hebreo.
En Napoles, Italia, llueve el abuelo del agua.
En Turquía la gente dice que cuando la lluvia es fuerte, el diablo celebra una boda por su hija.

Y si los rayos de sol se cuelan a codazos entre las nubes, y notas ese calorcito capaz de erizarte la piel y hacerte suspirar de gusto, recuerda que "los zorros se están bañando" en Finlandia, "un hombre pobre se hizo rico" en Kazajistán, "las brujas se peinan" en Cataluña, "el chacal se casa con la esposa del lobo" en afrikaans, "se casa una vieja" en Argentina, y en guaraní, el diablo. Aparece el cielo viejo en euskera o la lluvia ciega en ruso...

Es sorprendente que en Eslovaquia lluevan carretillas, pero en Hungría, si te mandan a la mierda, te piden que vayas "a cargar una carretilla de pequeños erizos". Por qué erizos pequeños, te preguntarás, la respuesta es genial: "más cabrán en una carretilla".
"Ve a peinar un mono", te piden en Brasil. O vete a esquiar a un abeto, en Finlandia.
Un vasco te envía a "colocar herraduras a las ocas".
"Aquí tienes un peso, compra a alguien con quien hablar" te insinúan en tagalo. "Sube a un árbol y endereza los plátanos", en polaco. En árabe, que vayas a "tejar el mar". ¿Has oído alguna vez la expresión en español "coge una escoba y vete a barrer el desierto"?

En Albania, te mandan a que te f**** un oso ciego, y por el culo de un burro desbocado te pueden decir en italiano. En la Toscana, te mandan a meterte un bote en el culo con los remos afuera. En guaraní, una sola palabra "añarakópeguare": irse a los genitales de la mujer diabla. En Francia, educadamente, te mandan a casa, que tu madre te hizo gofres.

La prisa mata. No por mucho madrugar, amanece más temprano. No hay que precipitarse, ni limpiarse el culo antes de cagar.
"Los oni (diablos) se ríen cuando hablamos del año que viene", es una expresión clásica en Japón.
"Es inútil perseguir el mundo, nadie lo alcanzará jamás", dicen en Argelia.
El darse prisa no tiene bendición, te advierten en swahili.
"Nadie muere en su víspera", dicen los tuareg. "La vela de nadie se enciende hasta el amanecer", dicen en Serbia.

Pero tampoco te duermas en los laureles, hay que ser precavid@s. En griego te recuerdan que "los hijos de los sabios cocinan antes de tener hambre" y también que "mejor atar burros que buscar burros". "Lo que podría haberse detenido con una azada de mango corto, se tendrá que detener con una pala", te recuerdan en coreano. Porque "quien no tiene cabeza, que tenga pies", es una frase que me viene siempre a la cabeza cuando tengo que volver a recuperar lo olvidado.

Y así termino ya, porque "todo tiene un final, excepto la salchicha, que tiene dos". Sí, en Alemania.

¿Tienes alguna expresión o dicho en tu idioma? ¡Coméntalo, pues!


Y si quieres leer más expresiones divertidas, links:

18 expresiones divertidas por todo el mundo: humor de idiomas

Sexpresiones: expresiones sobre sexo alrededor del mundo.

(Libro: El orden correcto de las galletas: y otras listas ensambladas meticulosamente de tonterías extremadamente valiosas (Inglés) por Adam Sharp.)

martes, 18 de diciembre de 2018

Parentesco de broma: la unión hace la burla.

 “La broma es la hermana pequeña de la verdad”. Proverbio congoleño.

Habitual en el occidente del continente africano, la "parenté a plaisanterie" o “parentesco (relación) de broma” da permiso a los miembros de una misma familia y a los miembros de ciertas etnias, a criticarse, burlarse e incluso insultarse entre ellos, sin ninguna consecuencia. Entre los bambaras de Malí se conoce como senenkunya; en Burkina Faso, los mossis hablan de rakiré; en Costa de Marfil de toukpé; gamu o kal entre los wolof de Senegal, en Senegal, entre los bantúes se llama utani, y entre los fulani dendiragal. 

Estos intercambios o duelos verbales, permisivos y lúdicos, afianzan los vínculos y resuelve conflictos entre grupos e individuos. Esta tradición desempeña un papel importante en el mantenimiento del orden pacífico en algunas sociedades, calmando las tensiones sociales y frustraciones que se pueden dar por la proximidad e intereses opuestos entre etnias o entre clanes familiares, a través de la risa. Y es que la burla no se dirige a la persona en sí, sino al individuo como miembro de un grupo, y son siempre recíprocos.

En estos intercambios no se les permite ofenderse por nada de lo que diga su compañero, y tampoco pueden dañar al otro de ninguna manera.  
La profesora Paquita Reche cuenta la anécdota que su amiga de etnia samo le relató sobre su infancia:

"Siendo muy pequeña se peleó con otra niña que era mosi. No recordaba la causa de la pelea, pero nunca olvidó que, de los insultos pasaron a los tirones de pelos, patadas y arañazos, hasta hacerse sangre. Su abuelo y el de la chica tuvieron que ofrecer un sacrificio de reparación, porque los parientes jocosos pueden insultarse. Pero entre ellos no puede haber sangre. Esto me hizo comprender que el parentesco jocoso era más que un juego o una diversión curiosa".

Los temas de las bromas son múltiples: hábitos alimenticios, mitos y leyendas,
hitos históricos... los chistes también cambian según la actividad económica que practican (comercio, agrícola, ganadera...), o su afiliación religiosa. También se hacen bromas sobre el lugar de un grupo dentro del sistema de castas. Paradójicamente, esta estandarización de los estereotipos permite la tolerancia entre grupos. Los estereotipos étnicos se convierten en objeto de una burla amistosa que cierra la brecha entre las personas, como una verdadera catarsis social. Es más, si el aliado de burla pide un favor, nunca hay que negarse.

"El otro día, hubo un oficial de policía que me detuvo con mi auto, pero él es Sidibé" le contó un informante a la antropóloga Rachel A. Jones. "Tomó mi identificación. La miró y dijo: 
- "Mírame, viejo bastardo. ¿Sabes que estás dando vueltas con un faro quemado? 
Le dije:
- Pero, pequeño bastardo, ¿qué me dices? No es verdad. 
Salí, pero descubrí que tenía un faro apagado. Yo, no lo sabía, pero el oficial de policía, él es Peulh (Fulani). Yo dije: 
- Ah, dame el costo de la bombilla, la bombilla que está quemada. Eres tú quien la vio. Debes pagarme el precio de la bombilla.
Voila, yo soy Kanté. Él es mi primo, pero es joven.

Él dijo: 
- ¡Eh! Si lo hubiera sabido, no te habría silbado.
 
El oficial de policía le dio dinero, mucho más que el precio de una bombilla nueva. Por lo tanto, debido al enlace de broma entre numu o herreros, que incluye kantés y fulanis, el informante consiguió que, gracias a su edad y destreza, obtuviese ganancia económica en lugar de una multa. A la inversa, si el oficial de policía hubiese detenido a otra persona más joven o menos adepto a la broma que este informante, la situación podría haber sido muy diferente.

Por eso, estas relaciones ficticias son capaces de poner fin a los conflictos graves. Hay documentado un caso en el que un grupo rebelde en el sur de Senegal liberó rehenes del grupo Diola porque el conductor rogó por sus vidas con éxito en nombre de la relación de broma Serer-Diola.
Otro caso fue el conflicto fronterizo entre Malí y Burkina Faso. Moussa Traoré era el presidente maliense y Sangoulé Lamizana su homólogo en el país vecino. Para resolver esta crisis el presidente de Guinea, Sékou Touré, que hacía de mediador, los recibió y, una vez reunidos, dispuso a su griot, Kouyaté, para que cantara antes de empezar la ceremonia. El griot mostró en su canción que ambos presidentes estaban vinculados por el parentesco de broma, y antes de que terminara de cantar ambos se levantaron, se saludaron y reconciliaron.

En Burkina Faso no existe ningún pueblo que no esté ligado a uno o varios grupos étnicos. De esta manera se crea una amplia red social, y "el pariente de mi pariente es mi pariente". Pero hay varias versiones de los orígenes del “parenté à plaisanterie”, dependiendo de las etnias. Entre los Mossi y los Samos, por ejemplo, este tipo de relación comenzó para resolver conflictos de guerra. Y entre los Bobos y los Peuls, para solucionar conflictos derivados de diferentes tipos de vida, sedentarismo de los primeros y nomadismo ganadero de los segundos. Los ­peúles y los yargas, dos etnias que viajan constantemente, unos por ser pastores nómadas y otros comerciantes, terminaron siendo aliados de bromas por esta característica en común.

El habla y las palabras son profundamente respetadas, y el conocimiento histórico-cultural, las redes sociales y las reglas culturales en el uso del lenguaje son la base de todas estas interacciones. Los bromistas intentan así superarse, a menudo para la diversión de los espectadores, a través de juegos verbales donde no caben las grosería, ganando prestigio social.

El “parentesco a broma” no conoce ningún tipo de límite en su práctica y puede realizarse sin consecuencias hasta en los entierros, donde los parientes pueden burlarse del difunto imitándolo o fingiendo llorar por su muerte. Pero en este caso, se trata de una puesta en escena que sólo los amigos más próximos e íntimos del difunto pueden realizar y sirve para desviar la idea de la muerte, banalizarla en cierto modo y recuerda los lazos que unen a ambas etnias. En algunas etnias, hay miembros de este parentesco de broma que entran en la tumba antes de que se introduzca al fallecido, lo que impide que se le entierre hasta que se le pague la suma que pide.

"Burkina Faso es un país que se siente orgulloso de conocer, después de casi 60 años de independencia, la estabilidad social y la ausencia de conflictos étnicos a gran escala como ocurre en otros países subsaharianos. El mérito se torna mayor cuando se tiene en cuenta la enorme diversidad cultural de este país, con 61 comunidades diferentes. Prácticamente todos están unidos entre sí por los lazos de este parentesco, lo que hace que no sea extraño escuchar a menudo a los burkineses en las calles bromeando y riéndose al decirse cosas como “La próxima vez os ponéis detrás, si estáis delante de los gulmances”; “Pues tú eres un alcohólico”, a lo que el otro responde “Y tú mi esclavo”; o bien esta interacción: “¡Ladrones, farsantes!”. Y, como respuesta, “¡Vosotros también!”. Y carcajadas.
En realidad, no hay ningún ladrón. Son dos miembros de etnias diferentes que, unidas través de la parenté a plaisanterie, se intercambian frases relacionadas con los aspectos de los que la tradición permite mofarse." cuenta María Rodríguez en la revista "Mundo Negro". 

Bobo esclavo, ¿quieres leche para empapar tu oruga?
Peul esclavo, ¿te ofrezco la cerveza de mijo para mojar tu carne?
Y cita a Albert Ouédraogo, profesor titular de Literatura Oral Africana en la Universidad de Uagadugú, que define estas interacciones como "guerra a través de las palabras” y explica: “El parentesco en broma permite a gente de diferentes edades, clases sociales y estatus bromearse cuando, por regla general, las bromas se hacen entre amigos de la misma edad y clase social”, eso sí, es necesario que el parentesco de broma se utilice antes del conflicto para prevenirlo o después para reconciliar, pero no funciona durante el mismo. En ese momento no se razona”. 
Ríe, y recuerda que una vez un cadáver desapareció. “Se lo había llevado uno de los parientes de broma con el coche. Ya no había que llorar porque no había muerto y había que pagarle para que mostrara dónde se encontraba el difunto”.
"El parentesco de broma muestra que la vida continúa”, zanja.

Fuentes:
http://mundonegro.es/la-broma-un-arma-contra-el-conflicto/
http://es.knowledger.de/0811033/LasDocenas
Recommended Citation
Jones, Rachel A., ""You Eat Beans!": Kin-based Joking Relationships, Obligations, and Identity in Urban Mali" (2007). Anthropology
Honors Projects. Paper 2.
http://digitalcommons.macalester.edu/anth_honors/2

sábado, 14 de julio de 2018

Competiciones y ritos extraños y maravillosos de todo el mundo.

Todos los años en el Día de los niños o "Kodomo no Hi" se celebra en Hiroshima el festival Nakizumo, una competición de sumo... pero con lloros de bebés.

Con más de 400 años de antigüedad, jóvenes practicantes de sumo llevan en brazos a bebés a un ring de sumo e intentan hacer llorar al otro bebé al grito de naki!: ¡llora! Muchos bebés lo hacen, aunque otros se quedan tan panchos o se ríen a carcajadas. Las máscaras para asustarles son el último recurso.

La tradición surge del proverbio 泣く子は育つ (Naku ko wa sodatsu) que significa “los bebés que lloran crecen rápido”.

En Kirkood, Sudáfrica, una competición consiste en meterse en la boca heces de kudu y las lanzan todo lo lejos que pueden. Esta actividad, que se lleva haciendo desde hace siglos, fue declarada Deporte Autóctono de Sudáfrica en 1994. 

Por la colina de Cooper cerca del distrito de Gloucester, Inglaterra, se lanza un doble queso gloucester que pesa 7 libras (3,17 kg), y los competidores deben correr ladera abajo a por él. La primera persona que alcanza la línea de meta gana el queso lanzado. 

Pero como dice Dennis O´Rourke en su película Cannibal Tours: “no hay nada más extraño, en una tierra extraña, que el extraño que la visita”.

En la Tomatina, en Buñol de la Comunidad Valenciana, al este de España, los
participantes se tiran tomates desde 1944. Una teoría muy popular dice que surgió de un disturbio en el que se atacó al asesor de gobierno con estos frutos. 
En el mismo país, en el carnaval de Entroido de Laza, Galicia, se arrojan hormigas rojas
En Haro, la Rioja, disfrutan de la batalla del vino
Y en la localidad levantina de El Puig con motivo de las fiestas de San Pedro Nolasco, colocan piñatas en cuyo interior puede haber caramelos o ratas muertas. Cuando la que se rompe es la de las ratas, los participantes se las arrojan unos a otros entre risas.

"Ya sea arrojando ratas congeladas o construyendo barcas con latas de cerveza, organizando carreras con caracoles o con las esposas a cuestas, la cuestión es que los seres humanos llevan mucho tiempo haciendo alarde de su creatividad en rituales y competiciones alocados, extraños y, en ocasiones, simplemente increíbles", escribe el infografista Nigel Holmes en "Crazy Competitions. 100 ritos extraños y maravillosos de todo el mundo"
Su frase: "Si no puedes explicarlo en términos simples, es que no lo entiendes", y así, lo exótico y extraño se convierte en algo cotidiano, ordinario y extraordinario a partes iguales.

Desde el buceo en ciénagas de Gales, o la ingesta de perritos calientes en Estados Unidos, o las claves para ser el primero en hacer llorar a un bebé en Japón, "es ilimitado el empeño humano por ganar y las proezas en las que poner a prueba la valentía, la resistencia o el puro absurdo". Como la vida misma.

Los habitantes de Darwin, una ciudad del norte de Australia, disponen de una regata de embarcaciones hechas a mano a base de latas vacías de cervezas. Su origen es de 1975. Cuenta la tradición que la regata nació como una iniciativa para limpiar las playas de la ciudad tras el paso del ciclón Tracy. Aunque no fue el ciclón el que dispersó las vacías latas de cerveza, sino los equipos que llegaron para reconstruir la ciudad después del ciclón, convirtiéndose en un verdadero problema para los autóctonos.


En el templo de Sri Santeswar de la India, un sacerdote deja caer un bebé desde una altura de nueve metros, que es recogido en una sábana sujetada por un grupo de hombres. 

En El Colacho español, en Burgos, un hombre que representa al diablo salta sobre los bebés durante el festival, para quitar el pecado original de los bebés recién nacidos. 

En Canadá, todos los años en febrero sumergen la cabeza en agua caliente a unos 40 grados, sacan la cabeza y dejan que se seque el cabello a temperatura ambiente, una media de -30 grados. A medida que el pelo se va congelando, se le da forma y, cuando se queda completamente escarchado, hay que sacarse una fotografía. Para descongelarlo, volver a sumerirlo en agua caliente, y listo.

Existe una singular versión del fútbol que se conoce como "calcio fiorentino" o "calcio storico", la que Enrique III de Francia describió como “demasiado pequeña para ser una guerra auténtica y demasiado cruel para ser un juego”.
Se originó
del “harpastum” en el Renacimiento entre aristócratas florentinos El haspastum era un juego de pelota de la Antigua Roma que a su vez se retomó de una práctica griega. 

La competición consiste en poner la pelota entre las porterías más veces que tu rival. Para ello los equipos tienen a 15 delanteros, a tres medios, a tres defensas y a tres porteros. Los delanteros deben luchar a cuerpo a cuerpo y uno a uno entre ellos (excepto patadas en la cabeza y ataques a traición, todo vale) para anular a los delanteros rivales y correr sin obstáculos hasta la portería.

En el Campeonato de Lucha Libre del Dedo del Pie en Ashbourne, Reino Unido, los competidores también se enfrentan cuerpo a cuerpo, pero con los dedos gordos del pie. La competición comenzó en un pub de Wetton en 1976. En 1997 se presentó una solicitud para que sea deporte olímpico oficial pero fue denegada y todavía no se ha aprobado.

"Pienso que el ridículo es el elemento dinámico, creador e innovador de toda conciencia que se quiera viva y que experimente lo vivo", explicaba el historiador de las religiones Eliade Mircea en "Invitación al ridículo". Y añadía:

"Creo que una buena definición del ridículo sería ésta: lo que puede ser retomado y profundizado por otro. No me refiero al ridículo maquinal, creado por automatismos e inhibiciones" (...) "El ridículo es una forma lanzada por los seres humanos contra la insinceridad. No existe acto humano sincero que no sea ridículo." 

"Sólo el ridículo merece ser imitado. Pues imitando el ridículo imitamos la vida; entraña en efecto, la completa sinceridad de la vida, y no las ideas fijas y convenciones que son las caras de la muerte. 
Y en cuanto a la muerte, bien sabe Dios que ya bastante la encontramos en todos nosotros."

Fuentes: